Febrero ha registrado una ligera subida del paro en la Región (+0,61 por ciento), con un aumento de 649 personas, repitiendo el comportamiento de los tres últimos años en el mismo mes y también el signo registrado en el ámbito nacional.

Sin embargo, también la afiliación a la Seguridad Social ha aumentado, concretamente un 1,02 por ciento, el mayor aumento nacional tras Baleares, una circunstancia que se explica porque el mayor número de parados no solo procede de los que han perdido el trabajo, sino que otros muchos son nuevas incorporaciones al mercado laboral. Así lo demuestra el dato del colectivo sin empleo anterior, cuyo número de parados aumenta en 338 personas, más de la mitad del total de crecimiento del paro en este mes.

A ellos hay que sumar las subidas tanto en el sector con más peso en la economía regional, servicios, que suma 356 nuevos parados, como industria, con un leve aumento de 27 personas. En sentido contrario han evolucionado agricultura, con una bajada en 12 personas y construcción, con 60 parados menos.

El incremento del número de parados a principios de año es un comportamiento característico del mercado laboral regional y nacional, que no impide la tendencia general de su reducción que se manifiesta en los datos interanuales, donde la Región de Murcia cuenta con 4.607 parados menos que hace un año (-4,13 por ciento). La creación de empleo, por su parte, se muestra vigorosa y, tras el aumento de afiliados a la Seguridad Social de febrero, suma un aumento interanual de 16.878 personas (+3,02).

Por lo tanto, y a pesar de la subida en términos absolutos del número de parados en febrero, nos encontramos con un dato coyuntural que no rompe la favorable tendencia que viene manteniendo el mercado laboral. Según todas las previsiones, durante los próximos meses continuará esta evolución de reducción del paro y creación de empleo en la Región, tal y como señalan en sus previsiones de contratación los empresarios a través de la encuesta de Eurocámaras, con un crecimiento del 11 por ciento neto de los encuestados. Sin embargo, también se aprecia un contexto de prudencia en las perspectivas de contratación (un 75 por ciento de los encuestado declara que mantendrá su número de trabajadores) debido, entre otras causas, a las incertidumbres derivadas de la actual situación política.