El Indice de Precios al Consumo en la Región de Murcia (IPC) durante el mes de enero ha experimentado una bajada del 0,1 por ciento.

Esta evolución está protagonizada por el grupo de vestido y calzado (-15,9), debido a las campañas de rebajas y ofertas de invierno; seguido de ocio y cultura (-0,3) por los menores precios de los paquetes turísticos. Por el contrario, los elevados precios de la electricidad durante el mes de enero se dejan sentir en el grupo de vivienda, que sube un 4 por ciento; al que acompaña transporte (+1,8), por los mayores precios de los carburantes; y alimentos y bebidas no alcohólicas (+1,3), por las subidas de legumbres y hortalizadas, junto al pescado.

A pesar del descenso mensual, la tasa interanual del IPC logra volver a situarse en terreno positivo, concretamente en el +0,4 por ciento, niveles similares a la media nacional (+0,5). Esta vuelta de los precios regionales a dígitos positivos, después de nueve registros mensuales negativos, está condicionada por la evolución en los últimos doce meses de la electricidad, calefacción, alumbrado y distribución de agua, que ha impulsado el grupo de vivienda a una subida interanual del 3,8 por ciento.

En conjunto, la tasa interanual supone un nivel de precios moderado que refleja la atonía de la demanda como consecuencia de la caída del consumo que viene provocando la pandemia. Este factor es citado por un elevado porcentaje de empresas cuando se les consulta sobre sus perspectivas, concretamente un 65,1 por ciento según el último Índice de Confianza Empresarial (ICE) que elabora la Cámara de Comercio de Murcia trimestralmente.

En esta línea, a corto y medio plazo, la evolución de pandemia, junto con los precios del petróleo, seguirán siendo los condicionantes con más peso en la evolución de los precios que, en todo caso, podrían situarse en el entorno actual.