Impacto económico del Covid-19

La epidemia de coronavirus amenaza con provocar una crisis semejante a la crisis financiera de 2008 en ausencia de una respuesta urgente y coordinada, según advirtió la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, durante una conferencia con los líderes de la Unión Europea (UE).

«Un escenario que recordará a muchos de nosotros la gran crisis financiera de 2008», indicó la banquera, según ha informado a Bloomberg una fuente familiarizada con los comentarios de Lagarde, para quien, con la respuesta adecuada, el impacto probablemente será temporal.

La presidenta del BCE ha asegurado durante la conferencia que la entidad está examinando todas sus herramientas, particularmente aquellas que facilitarían financiación barata y liquidez.
Sin embargo, según la fuente consultada, Lagarde ha advertido de que las medidas del banco central únicamente pueden funcionar si los gobiernos las respaldan con medidas para asegurar que los bancos prestan a las empresas en las áreas afectadas.

El Consejo de Gobierno del BCE se reunirá este jueves en Fráncfort, después de que el resto de los principales bancos centrales, incluida la Reserva Federal y el Banco de Inglaterra, hayan adoptado medidas de emergencia para luchar contra el impacto del coronavirus.

Ambos han rebajado de manera urgente y sin previo aviso los tipos de interés de sus respectivas divisas. Primero fue la Fed en EEUU y este mismo miércoles lo ha hecho el banco central británico. La rebaja en los dos casos ha alcanzado el medio punto porcentual.

En el seno de la UE, la Comisión Europea, a través de su presidenta, Ursula von der Leyen, anunció que movilizará de forma inmediata hasta 7.500 millones de euros de los Fondos Estructurales para crear un mecanismo que palie los efectos económicos del coronavirus en las pymes, evite los problemas de liquidez y ayude al sector sanitario.

Fuente: El Mundo

La demanda global de petróleo caerá por primera vez en 11 años

La demanda global de petróleo caerá en 2020 a causa del impacto del coronavirus (Covid-19) sobre la economía mundial, de acuerdo con las previsiones que acaba de hacer públicas la Agencia Internacional de la Energía (IEA, por sus siglas en inglés). Será la primera vez desde 2009 que se reduce las compra de crudo. La caída de los viajes, así como la ralentización de la actividad industrial, están detrás de esta caída de la demanda.

«La crisis del coronavirus está afectando de una forma muy amplia a todo tipo de mercados energéticos, incluido el carbón, el gas y las renovables. Pero el impacto en el mercado petrolífero es especialmente severo porque la gente está viajando menos, y hay menos movimientos de mercancías, lo que ha hecho que se desplome la demanda de petróleo», explica Faith Birol, director ejecutivo de la IEA. «Este efecto es especialmente relevante en China, el mayor consumidor de energía del mundo, que el año pasado acaparó el 80% del incremento mundial de la demanda de crudo», explica en un comunicado.

La situación del mercado permanece extremadamente fluida. De hecho, las previsiones realizadas por la IEA no han tenido en cuenta la guerra del petróleo desatada entre Arabia Saudí y Rusia, que ha provocado que el precio del barril caiga por debajo de los 30 dólares.

Aún así, en el escenario base de la agencia, la demanda caerá por debajo de 100 millones de barriles al día, lo que supone 90.000 barriles menos que en la actualidad. La previsión de la IEA ha cambiado drásticamente respecto a febrero, cuando apuntaba a un crecimiento de la demanda de 835.000 barriles diarios durante 2020.

Las perspectivas a corto plazo del mercado petrolífero dependerá de la velocidad de reacción de los Gobiernos para frenar los contagios de coronavirus, y cómo de exitosos son los esfuerzos para reducir el impacto de esta crisis sanitaria sobre la actividad económica.

En el escenario más pesimista trazado por los técnicos de la IEA, la demanda global de petróleo caería en más de 730.000 barriles al día en 2020.

«El impacto del coronavirus sobre el mercado petrolífero podría ser temporal. Pero los desafíos a largo plazo para los productores no van a desaparecer, especialmente para aquellos países muy dependientes de los ingresos del petróleo y del gas», apunta Birol.

Fuente: Cinco Días

España y Alemania hacen defensa común de una PAC que tenga suficientes fondos

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, y su homóloga alemana, Julia Klöckner, han hecho este martes una defensa común de una futura Política Agraria Común (PAC) que esté «a la altura de las circunstancias». Así se ha expresado Planas tras la reunión mantenida con Klöckner en la sede del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) en Madrid, en el marco de los contactos previos a la Presidencia alemania de la Unión Europea (UE) en el segundo semestre de 2020.

Juntos han abordado asuntos de interés común como las negociaciones de la próxima PAC para el periodo 2021-2027, sobre la que todavía no hay acuerdo comunitario.

Planas ha reafirmado algunos de los principios contenidos en el documento que firmaron en diciembre pasado España, Alemania y Francia a favor de «una PAC que esté a la altura de las circunstancias en retos como el cambio climático, la mitigación y la preservación del medio ambiente». Asimismo, ha reivindicado la «flexibilidad» de los distintos países para aplicar dicha política, que debe resultar «sencilla» para los productores y las administraciones.

Ha insistido en que esperan que la PAC venga dotada de una «dotación importante», al tiempo que ha defendido que los planes estratégicos nacionales y otras iniciativas dentro del nuevo Pacto Verde Europeo también «estén a la altura de los retos».

«Los problemas en Alemania son similares a los que discutimos en España», ha enfatizado Planas, tras resaltar que los agricultores y ganaderos necesitan «mejor apoyo para tener unos ingresos que permitan hacer rentables y viables sus explotaciones».

Junto a su homóloga, Planas ha abordado la directiva europea que protege el intercambio intracomunitario de productos, el etiquetado sobre bienestar animal y la peste porcina africana, un riesgo ante el que no se puede «bajar la guardia». «España, Francia y Alemania están cooperando estrechamente y vamos marcando las pautas», ha afirmado la ministra alemana de Agricultura y Alimentación.

Frente a la compra de terrenos de grandes inversores que encarecen el precio del suelo y las cosechas en algunas regiones, Klöckner ha mostrado su interés en apoyar a los jóvenes para que continúen ejerciendo la agricultura.

La titular alemana ha destacado la importancia de la directiva europea contra prácticas comerciales desleales y ha instado a ayudar a los agricultores, que están realizando un «servicio para toda la sociedad». A su juicio, sin que sean un «producto de lujo», los alimentos podrían incluso venderse unos céntimos más caros para ayudar a incrementar los ingresos de los productores.

Por otra parte, la ministra ha asegurado que están «de acuerdo en que debe haber normas mínimas ambientales para cada país miembro» pero en contra de «imponer más exigencias que acaben encareciendo los productos» frente a la competencia de los que proceden de fuera de la UE.

Ante las necesidades de un sector que sufre los efectos del cambio climático, Klöckner ha reclamado un presupuesto europeo «consecuente» porque, de lo contrario, la situación podría empeorar.
Alemania ha vivido en los últimos meses protestas de agricultores que han salido a las calles en contra de las medidas ambientales que les están exigiendo las autoridades, mientras que en España las manifestaciones están más centradas en pedir que se paguen precios justos en origen, por encima de los costes de producción.

La ministra alemana también ha reclamado un etiquetado que garantice el bienestar animal y, en relación con el coronavirus, ha coincidido con Planas en que no hay «ningún tipo de escasez» de alimentos, a pesar de las compras masivas en supermercados por el aumento de los casos de contagio y las medidas de contención tomadas.

Fuente: Agrodiario